Se trata del hábito involuntario de rechinar los dientes sin ningún objetivo funcional. Al someterse a una constante presión y fricción de ambas arcadas dentales, se producen tres sucesos.

El primero de ellos es un desgate de las carillas dentales.

El segundo es una hiperactivación de la musculatura masticatoria que suele acabar desarrollando CEFALEAS DE ORIGEN TENSIONAL (dolores de cabeza causados por tensión a nivel muscular) y dolor a nivel del cuello y de la cara. 

El tercer suceso es el aumento de presión a nivel intradiscal. Esto puede conllevar un DESPLAZAMIENTO DEL DISCO que derive en una limitación de la aperturade la boca tanto por bloqueo articular como por dolor.

Se trata de dolor agudo a nivel dental, sobre todo en los incisivos inferiores, que no tiene su origen en ninguna patología odontológica, ni infecciosa y que suele estar relacionada con la activación de puntos gatillo de la musculatura de la cara anterior del cuello.

Se trata del atrapamiento del músculo temporal dentro del orificio cigomático al realizar movimientos protusivos de mandíbula al masticar, hablar, hacer deporte, leer, trabajar con ordenador, apoyar la mandíbula sobre la mano…. Este síndrome se caracteriza por presentar dolor a la palpación o espontáneo en la zona del pómulo, pérdida de estabilidad, mareos, vértigos y cefaleas de tipo tensional. El dolor puede ser uni o bilateral, e incluso irradiar hacia oído, sien Y nuca.

Se denomina cefalea cervicogénica, a los dolores de cabeza que no tienen relación con tensiones a nivel muscular, y por lo tanto, tienen su origen a nivel de articulaciones cervicales. Estos dolores de cabeza suelen tener un patrón muy concreto, siendo casi siempre unilaterales. En los pacientes afectados se producen alteraciones posturales tales como: adelantamiento de cabeza, protracción de hombros y cambios en la cifosis dorsal.